domingo, 14 de enero de 2018

Visita a Viena



Pasear por Viena en Navidad es un placer sensorial, frío y elegante. Placer por la emoción que trasmite la belleza arquitectónica de sus palacios. A derecha, a izquierda, de frente, al fondo. Mires donde mires, puedes ver un hermoso edificio de diferentes estilos, aunque la mayoría barrocos, que desde el siglo XIII al XX edificaron prestigiosos constructores. 
Vestigios del imperio occidental que con Felipe II, superó en extensión al Imperio romano. Fernando I de Austria, hijo de Juana  de Castilla y hermano de Carlos I de España, tuvo las coronas de San Wenceslao y San Esteban. Me gustó volver a oír la historia de Austria tan relacionada con España.
San Esteban es también esa hermosa catedral que se ve de cualquier sitio, porque las iglesias también provocan admiración. La Ópera, el Ayuntamiento, el Parlamento con Atenea.
Resumiendo la visita a Viena fue un festín para los sentidos : Mirar belleza.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]

<< Inicio