lunes, 29 de abril de 2013

Razonar y no entender

Entender: comprender, deducir, discernir, conocer, descifrar, saber, intuir, asimilar… Creo que el diccionario dedica algunas acepciones más a esta bonita y simple palabra del español. Me cuesta reconocerlo, pero tengo que decir que no entiendo:
NO ENTIENDO porqué
si contrato una tarifa de móvil más reducida, termino pagando más que antes,
si cambio mi contrato de luz, por otro ventajoso, termino pagando más que antes,
si mi casa hoy vale menos,  pago de IBI más que antes,
y  puedo seguir más y más :
Los que prometían crear empleo, facilitan el despido y no para de aumentar el desempleo. Los que no supieron gestionar la crisis y nos condujeron al abismo, hoy tienen el remedio para salir del precipicio. Los sindicalistas que debieran defender los derechos de los trabajadores, despiden a sus empleados en las peores condiciones posibles.
Me viene a la memoria aquel famoso tango llamado Cambalache ( de Enrique S. Discepolo), que decía que el siglo XX era un despliegue de maldad insolente y otro montón de aciertos muy vigentes hoy día. Sin embargo yo el siglo XX, entendía, porque siempre ha habido personas buenas y menos buenas, quien te ayudaba desinteresadamente y quien te quería engañar. Abrías una cuenta en el Banco con 100 pesetas y te daban una cartilla clarísima con tu nombre y tu dinero. Para lo mismo ahora, firmas un contrato de un montón de hojas, con letra pequeñita, supongo que para darle poder al susodicho Banco, de que haga lo que quiera con tu dinero y además te cobre por ello. Cualquier contrato, sino eres un especialista en la materia, no lo entiendes. Será por eso que los políticos tienen tantísimos asesores. También quiero uno, o varios.




domingo, 21 de abril de 2013

Sol y Música

A las cinco de la tarde.
Es el comienzo de un poema de Federico García Lorca, pero no me estoy refiriendo a él, no quiero saber nada de la barbarie de matar toros, después de torturarlos, por más que quieran llamarlo fiesta o arte. No.

Es domingo, a las cinco de la tarde, en la Plaza Mayor de Madrid, disfrutando de su austera, simétrica y hermosa arquitectura. Sentados frente a un cremoso capuchino, con artístico dibujo y deliciosa nata. Con el Sol  proporcionándonos un calorcito que la piel agradece y si algo faltaba para completar el festín de los sentidos, comienza una melodía desde un acordeón, que inunda la plaza con su armonioso sonido. Es un momento mágico y lo mejor, es que somos conscientes de ello, así que lo guardaremos con los recuerdos bellos. Un placer inesperado y sencillo.

viernes, 12 de abril de 2013

Lo que el mal tiempo impide

Este año la Primavera no termina de llegar, la lluvia y el frío en Madrid son algo inusual en el mes de Abril.
Algunas flores han faltado a su cita, nuestro albaricoquero, después de 15 años no se ha vestido con sus hermosas galas blancas que luego se convertirían en jugosos frutos, tampoco han salido las estrellitas del jazmín  y nos hemos visto privados de su perfume, del limonero, mejor no hablo, espero que resucite...
Sin embargo en medio de los días grises y la lluvia sí o sí, ha llegado Miguel que con sus dos añitos, ha visto las flores que debían alegrarnos la vista y el olfato, pero que no hemos tenido ojos para darnos cuenta de que estaban. Y no eran pocas: jacintos, narcisos,anémonas, forsitia,  vinca per vinca cerezo de flor blanca y alguna más. Es algo que nos pasa muchas veces, nos encerramos en nuestra pequeñez cotidiana, los problemas, la crisis, las noticias, el MAL TIEMPO y no somos capaces de ver lo que florece a nuestro lado. Menos mal que siempre puede haber un niño para enseñarnos con ojos nuevos: las flores moadas, bancas, maillas, dojas. Todo aquello hermoso que nuestra rutina no nos permite disfrutar.